Luca della Robbia


Luca della Robbia (1399-1482)
Nació en Florencia, Toscana, Italia. Escultor religioso de escuela florentina, impulsor de cambios a principios de la era renacentista. La historia no guarda información de su juventud. Ya maduro fue un vanguardista de su época y destaca por la originalidad y frescura de sus obras que encantan a primera vista. Della Robbia realiza trabajos en terracota (arcilla al horno), cubierta con barniz (vitrificado). La técnica utilizada para generar el material básico, la cocción y el brillo de sus lacas era exclusivo y provenía de una receta desarrollada por su misma familia, dedicada por generaciones al uso artístico de la arcilla. Una vez terminada la escultura, se pintaba de color blanco para simular marmol y finalmente se sellaba con esmalte incoloro. Contemporáneo de Donatello, igualmente brilló con estilo separado del gran maestro del Renacimiento. La perfección de las formas que logra Della Robbia lo situan en la historia de la escultura como uno de los mejores. Su figura representa a aquellos que el arte les conmueve para actuar con heroismo. Della Robbia, como buen pionero, arriesgó todo por innovar los estilos medievales reinantes. La expresión de sus obras comprueban que valió la pena, otorgándole sobradamente, un lugar de privilegio en la historia de la escultura europea.